Por Manuel Hidalgo Tupia
Con la propuesta de una Zona
Económica Especial (ZEE) relacionada al mega puerto de Chancay (ver post)
, se expresan opiniones respecto a las características de dicha zona. Pero
todos tienen en la mente la experiencia reciente de la Zona Francas o las Zonas
Especiales de Desarrollo qué ha experimentado el Perú con logros
desalentadores, en los últimos 30 años y más. Y es que no necesitamos nuevas
zonas francas, que ofrecían únicamente mano de obra barata y exoneración de
impuestos. Ahora necesitamos ZEE de nuevo cuño, especificamente siguiendo la
experiencia de Corea del sur y China, con el así llamado modelo Shenzhen, ese
humilde pueblo de pescadores que después de 35 años se ha convertido en el
nuevo Sillicon Valley, siendo sede de las principales empresas globales de
internet, celulares, mercadeo electrónico, robótica, drones, entre otros.
Shenzhen: Su vista actual y como se veía a inicios de los años 80
Las ZEEs fueron la estructura
institucional que facilitó la apertura y la industrialización de China, junto
con un estado central promotor y regulador de un mercado cada vez más bullente.
En la Zona Económica Especial de Shenzhen,
se evolucionó de una industria centrada en la mano de obra (intensiva en mano
de obra), a la industria centrada en el capital (intensiva en capital), a una
industria centrada en la innovación tecnológica (intensiva en tecnología). Esto
produjo una masiva transferencia tecnológica a través de los trabajadores, las
empresas chinas coinversoras y las instituciones científicas públicas chinas. Este
proceso es el que está construyendo la realidad de un nuevo orden industrial y
comercial, donde la fábrica del mundo paso de Sheffield o Birmingham
(inglaterra, siglo XVIII), después Pennsilvania
(EEUU. Siglos XIX y XX) , hasta Guangdong (China, siglo XXI).
¿Como evolucionaron las ZEE en
Corea del sur y China para construir industrias centradas en la innovación
tecnológica? Una característica de ambos países es que poseen Planes
Quinquenales, en los cuales se planifica y concerta la actividad pública y
privada para metas concretas de producción y exportación de productos hacia el
futuro, además de otros aspectos referentes al bienestar y el desarrollo
cultural. Esto incluye una política científica y tecnológica bajo
responsabilidad del Estado y la participación crucial de universidades públicas.
De esta manera, Corea del Sur y China van introduciendo el vector tecnológico a
partir de los a veces llamados Parques Científicos y Tecnológicos, con Zonas
Económicas Especiales de Alto Desarrollo Tecnológico, como se dan en Shanghái y
Shenzhen en China. Asimismo, En Corea del sur las más recientes ZEE compiten
por atraer centros de investigación o laboratorios de las universidades del
país.
Un tema crucial en China es la presencia de empresas estatales
públicas en la estrategia industrial y tecnológica del país. Pongamos el caso
de la industria de los semiconductores (chips). La empresa privada china Huawei,
qué está en una carrera por permanecer en el mercado de celulares e internet,
frente a las prohibiciones originadas en los Estados Unidos, que limita la
exportación de semiconductores y de maquinaria avanzada para producir
semiconductores que tengan tecnología norteamericana, en aras de una
inconducente “guerra comercial”. Huawei está contando con la empresa china
SMIC, Semiconductor Manufacturing International Corporation, empresa china privada
abierta productora (fundidora) de semiconductores, pero que a su vez depende de
la compañía estatal SMEE, Shanghai Micro Electronics Equipment Group, que
fabrica la maquinaria litográfica para producir los chips, mercado que lidera y
domina la holandesa ASML, que está restringida en sus ventas a China por
Washington. De momento, Huawei, SMIC y SMEE están aplicando una estrategia bien
coordinada con el Gobierno chino para asegurar el autoabastecimiento de los
vitales semiconductores o chips a la industria china, que es la principal
demandante del mundo.
Entonces, la Ecuación sería:
ZEE +
Infraestructura + Promoción industrial activa del Estado + Parques científicos y tecnológicos = Avance industrial.
¿Nos falta mucho?. Si. La brecha
tecnológica es masiva, pero … no necesitamos hacer todo el camino paso a paso,
sinó direccionar la transferencia tecnológica. Aún asi, el Perú debe avanzar en
cada uno de estos sumandos en forma coordinada para llegar al objetivo.
Para un análisis teórico de las
ZEE y su potencial desarrollista en Perú; ver el articulo de investigación
publicado por un grupo de docentes en que se incluye el autor: Analysis
in the Special Economic Zones as a Strategy to Promote Economic Growth in Peru
27.2.24
No repetir las limitaciones de las Zonas Francas o las ZED, si se necesitan ZEE ligadas a la innovación tecnológica. Nadie dijo que era facil, pero tenemos una oportunidad dorada hoy ... si la aprovechamos
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