Como financiar de verdad el desarrollo

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En sus casi 4 años, este blog ha presentado el tema del desarrollo y su financiamiento; en esos dias de 2016, con todo el optimismo sobre el crecimiento peruano, el incremento de las inversiones extranjeras, la fructificación de los antiguos proyectos de inversión publica, y la inclusion del Perú en la iniciativa desarrollista china de Una Franja, una Ruta.

Al cabo de todo este tiempo, la realidad estuvo muy por debajo de las espectativas.

        I.            El proyecto de Corredor ferroviario bioceánico con financiamiento chino fue rechazado por un jaqueado presidente PPK;

      II.            El caso Lava Jato, con la brasileña Odebrecht, tuvo el efecto de una bomba sobre los proyectos de infraestructura, algunos de los cuales se retrasaron, y otros se cancelaron.

    III.            La inversión extranjera se puso lenta, por la violencia social (Tia María), recesión mundial y la guerra comercial entre nuestros dos principales socios, China y EEUU,

    IV.            Se deplomó la inversión pública a niveles históricos;

No obstante, el potencial regional se mantiene, aún en medio de la desestabilización geopolitica.

La receta para financiar nuestro desarrollo  sigue siendo la que propusimos en 2016: el modelo norteamericano original del primer secretario de Hacienda, Alexander Hamilton (1757 – 1804) , expresado magistralmente en su obra institucional, el Primer Banco Nacional de los Estados Unidos, y sus informes: sobre el Banco Nacional, del Crédito Público y Sobre las Manufacturas.

Pero, para responder cualquier objeción de anacronismo, debemos referirnos a la propuesta actual (2014)  para los Estados Unidos, formulada por el hoy finado economista Lyndon. LaRouche, las Cuatro Leyes Fundamentales consistente en :

(1) la inmediata re-promulgación de la ley Glass Steagall del Franklin D. Roosevelt (Separación de la banca comercial de la banca de inversión).

(2) El retorno a un sistema de Banca Nacional preciso y minuciosamente definido (control público de la emisión monetaria).

(3) El propósito de la utilización de un Sistema de Crédito Federal, es generar pautas de alta productividad en las mejoras del empleo, con la intención complementaria de aumentar la productividad económica-física y los niveles de vida de las personas (Financiación pública de la infraestructura fisica)

(4) "Adoptar un 'programa de emergencia' orientado por la fusión (nuclear)", ( programa científico de largo alcance).

En nuestro país, estas medidas tendrían un resultado óptimo, con el cuidado que requiere su aplicación dada su institucionalidad debilísima y su dependencia de la inversión extranjera. Por ejemplo, el Perú está traumado por la gran hiperinflación de 1987- 90 respecto al control público (Ejecutivo) de la emisión monetaria.

Pero también para los traumas hay tratamiento. Entretanto, son suficientes los cambios constitucionales del caso y la actuación de una verdadera Corporación Financiera de Desarrollo, no el minúsculo COFIDE que conocemos hoy, que le “prestaba” hasta a Odebrecht.

Toda la vida el Estado en los países que se desarrollaban le pidieron prestado al pueblo, como el caso de los Bonos del Tesoro. Y ese dinero siempre financió los grandes proyectos.

Es una falacia completa decir que no lo podemos hacer. La infraestructura, financiada nacionalmente y con convenios gobierno a gobierno, como lo ofrece China, es la garantia del bienestar de nuestros hijos.

2.3.20