A veces, parece que los medios de
prensa se dedicar a sumir a las naciones en la desesperanza, cuando quieren imponer
sus agendas unilaterales, pero es nuestro deber, reconociendo la crisis
vigente, darle a nuestras naciones un vislumbre de un futuro más humano,
totalmente alcanzable, como expone el vídeo del Instituto Schiller, que se comparte.
Hay varios aspectos a reconocer:
1. Casi la mitad de los países de América Latina ya están unidos a la gran iniciativa de cooperación internacional de China, Una Franja, Una Ruta, (ver también aquí) con lo cual la esperanza de llevar a cabo los grandes proyectos desarrollistas, como los corredores bioceánicos de desarrollo y logísticos, el mejoramiento de los puertos, creando grandes complementariedades de conectividad y desarrollo industrial, se consolida.
2. El impulso económico global no se ha detenido, pese a las grandes amenazas de la crisis financiera global, gracias en gran parte del compromiso de China en estabilizar el comercio y las inversiones, constituyéndose para América Latina en el segundo socio comercial y el tercer socio en inversiones
3. Los inmensos avances científicos y tecnológicos, alrededor de los avances en la exploraciones espacial, por ejemplo, el programa de China de explorar el lado oscuro de la Luna; o el desarrollo de los ferrocarriles de levitación magnética (maglev), o los avances en la energía nuclear, pasado de la fisión a la fusión nuclear progresivamente,
4. Hasta el momento, disminuyen los riesgos de una conflagración internacional, con la retirada de las tropas norteamericanas de Siria, dispuesta por el presidente norteamericano Donald Trump.
2. El impulso económico global no se ha detenido, pese a las grandes amenazas de la crisis financiera global, gracias en gran parte del compromiso de China en estabilizar el comercio y las inversiones, constituyéndose para América Latina en el segundo socio comercial y el tercer socio en inversiones
3. Los inmensos avances científicos y tecnológicos, alrededor de los avances en la exploraciones espacial, por ejemplo, el programa de China de explorar el lado oscuro de la Luna; o el desarrollo de los ferrocarriles de levitación magnética (maglev), o los avances en la energía nuclear, pasado de la fisión a la fusión nuclear progresivamente,
4. Hasta el momento, disminuyen los riesgos de una conflagración internacional, con la retirada de las tropas norteamericanas de Siria, dispuesta por el presidente norteamericano Donald Trump.
Todo ello abre lugar a un sano optimismo, que debe inducir a nuestras naciones a lograr los programas industrializadores que el momento actual nos franquea. Por ejemplo, planteando una Plan Industrial Nacional, un Plan Nacional de Infraestructura y asimismo el consiguiente desarrollo de las nuevas instituciones de ciencia y tecnología que nuestras naciones necesitan.
La “receta” para el desarrollo ya se conoce, hace falta disipar las tinieblas de la corrupción y la demagogia para hacerlos brillar en una nueva Era humana.
Felicidades para todas las naciones del mundo … ¡El desarrollo es el nuevo nombre de la Paz!
29.12.18
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